Eráse una vez en una piscina …

Eráse una vez en una piscina …

بسم الله الرحمن الرحيم

Muchas de las mujeres musulmanas latinas queremos estar en forma, cuidar de la salud  y practicar deportes, pero ésto no es tan fácil de lograr,  en muchas ciudades no hay espacios deportivos exclusivos para mujeres lo cual dicho sea de paso sería un proyecto interesante como oportunidad de negocios: Crear espacios deportivos exclusivos para mujeres, gimnasios, escuelas de natación o de artes marciales, y dije – dicho sea de paso- porque hoy no voy a hablar de las mujeres musulmanas y su participación en el comercio y los negocios, hoy voy a hablar de lo importante que resulta destinar tiempo a nosotras mismas para el descanso, despejarnos y renovar energía.

Hay muchas clases de juegos y deportes que el el mensajero de Allah  paz y bendiciones sean con él, su familia y sus descendientes, recomendó a los musulmanes como una fuente de recreación y diversión y   los cuales  al mismo tiempo, nos preparan para la adoración en la realización del salat  y otras obligaciones de resistencia física por ejemplo el trabajo y el ayuno durante el mes de ramadan. Practicar un deporte fortalece el habito de ser disciplinadas, hacen posible que desarrollemos habilidades y determinación, que nos esforcemos e incluso que practiquemos el autocontrol y elevemos nuestra tolerancia ante la frustración.

Las mujeres cumplimos varios roles con diversas exigencias físicas y mentales, dormir mal o no dormir suficiente puede producir agotamiento y sentimientos de tristeza, muchos factores pueden evitar que tengamos un buen descanso con un sueño reparador, por ejemplo la apnea de sueño – cuando se detiene brevemente tu respiración durante la noche, entonces cada interrupción te despierta por un momento – esto puede presentarse al encontrarnos en sobrepeso; Comer los alimentos equivocados también puede ser un problema para sentirnos cansadas por falta de energía, y en ayuno podemos encontrar muchos beneficios a menos que padezcas de anemia, llevar una vida rutinaria también puede hacernos sentir y ver como mujeres agotadas, cansadas o aburridas.

El Islam es una religión práctica con un estilo de vida preventivo, en el sagrado Coran se refiere al tiempo y al uso que hagamos de él y se reconoce que Allah enaltecido sea-  creó al ser humano con necesidades y deseos, de manera que, así como necesitamos comer y beber, necesitamos también descansar y distraernos.

Las esposas de nuestro amado profeta  cumplían varios roles como esposas, madres, estudiantes y educadoras, hoy día a muchas de nosotras nos ha sido decretado cumplir varios roles y aprender varios oficios,  la psicología habla acerca de la ocupación del tiempo libre, de dejar un tiempo exclusivo para estar a solas con nostras mismas o hacer actividades que nos agraden y nos llenen de energía, la psicología también habla de la sana diversión en familia y las ventajas de  jugar con los niños ya que es una maravillosa forma de enseñar valores y a ser más tolerantes. El juego fomenta la independencia, la autoestima, a la mayoría de los niños y niñas les resulta más sencillo interiorizar normas mientras juegan, con el juego fomentan también la creatividad, y por supuesto se divierten. Cuando el niño o la niña inicia la practica de algún deporte en compañía de sus padres se genera una mayor sensación de confianza y seguridad, son muchos los adultos y niños que tienen miedo al agua y  que no saben nadar y otros tantos que por la falta de practica han olvidado como realizar bien los movimientos en cada variado estilo de  natación. Se puede aprender a nadar y a superar el miedo a hacerlo a cualquier edad y eso fue lo que intentamos hacer con un grupo de hermanas musulmanas hace un par de semanas mientras disfrutábamos de tiempo libre en compañía de nuestros hijos en un campamento para musulmanes y musulmanas en un pueblo cerca a la ciudad de Cali  en Colombia, en el que se tomaron las medidas de protección y se mantuvieron los modales necesarios para que pudiéramos ingresar a la piscina solo mujeres con hijos e hijas pequeños, mientras lo hombres se encontraban lejos del lugar en otra actividad, compartir ese tiempo con los hijos e hijas  dejó recuerdos valiosos pues no es fácil encontrar un lugar que nos permita ingresar a la piscina cubiertas y que no hayan hombres compartiendo el mismo espacio, fue curioso encontrar que muchos de los niños y niñas no sabían nadar, y la mayoría de hermanas musulmanas tampoco, entonces allí estábamos compartiendo una piscina y enfrentando miedos, practicando misericordia y buenos modales, y enseñándoles a nuestros hijos e hijas que en el deporte hay beneficios, ya antes habíamos aprendido aquellas palabras registradas en el sagrado Corán:

«¡Creyentes! ¡No os burléis uno de otros! Podría ser que los burlados fueran mejores que los que se burlan.  Ni las mujeres unas de otras.  Podría ser que las burladas fueran mejores que las que se burlan. ¡No os critiquéis ni os llaméis con motes ofensivos! ¡Mala cosa es ser llamado ‘perverso’ después de haber recibido la fe!  Los que no se arrepienten, ésos son los impíos». (49:11).

Cómo musulmanas conversas muchas de nosotras no habíamos vuelto a ingresar a una piscina por lo que ésto no solo era tiempo y oportunidad para refrescarnos ante la alta temperatura que ofrecía el pueblo, era la posibilidad de volver a practicar un deporte ahora en condiciones distintas y en compañía de nuestros hijos para que ellos se sintieran más seguros. El Profeta Muhammad, que la paz y las bendiciones de Allah estén con él dijo:

“Cada uno de ustedes es un pastor, y cada uno de ustedes es responsable de su rebaño.” (Sahih Al-Bujari, Sahih Muslim)

La madre vista desde el islam es la pastora de la casa, es también la principal responsable de la orientación y educación de los niños, muchos hijos aprenden y practican deporte con padres y tíos y poca oportunidad queda para las mujeres,  para un musulmán es importante hacer todo lo posible para hacer del tiempo el mejor uso posible en cosas beneficiosas. Durante el campamento recibimos clases y pudimos aprovechar para integrarnos con hermanas musulmanas Colombianas que vivían en otras ciudades y extranjeras que por diferentes motivos también vivían ahora en Colombia, de tal modo que se afianzaron los lazos en la comunidad, Alhamdulillah por ésta maravillosa experiencia que incluyó dentro de la programación académica un espacio para la recreación y el deporte.

El musulmán puede hacer uso de parte de su tiempo en hacer Dua y en  diker de Allah (recuerdo de Allah) y también puede hacer  acciones que promueven la unión familiar,  la salud mental y física. Se ha reportado que el Profeta Muhámmad (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) solía correr carreras con  su esposa Aaishah, también bromear con su familia, jugar con ellos, tratarlos con gentileza y conversar con ellos durante la noche.

Áhmad (24334) narró que ‘Aa’ishah (que Allah esté complacido con ella) dijo: “El Mensajero de Dios (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) dijo en el día en que los abisinios estaban jugando en la mezquita: “Que los idólatras y los judíos sepan que hay espacio para la diversión en nuestra religión. La religión que se me ha revelado es monoteísta y tolerante”. Clasificado como auténtico por al-Albani en Sahih al-Yámi’, 3219.

Quiera Allah enaltecido sea facilitarnos ser misericordiosas, suponer lo mejor de las personas y no sospechar ni buscar los errores en los otros para difamar como hacen los hipócritas, inshaAllah todas podamos  llevar una vida acorde al islam mostrando la belleza del islam, y facilitando los asuntos,  los errores son míos, los aciertos de Allah, astagfirullah por el pasado.

María del Pilar Mena Parra.

Colombia.

Cerrar menú